La Federación de Enseñanza de CCOO en CyL ha realizado una encuesta entre casi 1.000 docentes de la comunidad, para conocer como están desempeñando su trabajo a distancia durante el COVID-19.
En el momento actual, queremos en primer lugar valorar el extraordinario esfuerzo de las y los docentes, que han tenido que reinventarse y trabajar de manera virtual de un día para otro, ante estas circunstancias especiales.
Desde la Federación de Enseñanza de CCOO en Castilla y León (FECCOOCYL) hemos elaborado una encuesta, con la intención de acercarnos a la realidad de nuestro profesorado y analizar cómo la están viviendo. En la misma han participado 948 docentes de todas las enseñanzas, aunque mayoritariamente de Primaria y Secundaria.
El teletrabajo docente implica la necesidad de un contacto y trabajo colectivo con diferentes grupos de alumnos/as, a la vez que se precisa un trabajo individual, como respuesta a sus tareas y trabajos.
De media un@ docente atiende a 60 alumnos/as, aunque dependiendo el caso pueden variar desde cuatro a más de 150, según cuerpos y especialidades.
Entre el alumnado existe un 40% que no cuenta con todos los medios necesarios, por tanto, el trabajo docente se complica y requiere mucho más tiempo del de su jornada habitual. Tiempo que, a su vez, tiene que compaginar con la necesaria conciliación para atender personas a su cargo, que aproximadamente, afecta al 50% de las personas encuestadas.
Asimismo, para mantener un derecho fundamental como la educación en estas circunstancias adversas, el profesorado ha puesto todos los medios necesarios: conexión a internet, ordenador u otros dispositivos, e incluso su teléfono personal cuando las necesidades de sus alumnos/as así lo han precisado. Sin embargo, la realidad es que no todo el profesorado cuenta con suficientes medios, ni con la formación y habilidad para usarlos como único recurso a la hora de impartir docencia.
Por todo ello, creemos que se debería valorar el esfuerzo realizado por el profesorado, ya que de la encuesta se extrae el compromiso de tod@s en la realización de su tarea docente, en definitiva, su compromiso con la educación. Además de reconocer el que están realizando el alumnado y sus familias.
El 51,6% del profesorado encuestado considera que las actividades virtuales diseñadas por la administración son malas o muy malas. Esta valoración nos lleva a considerar la necesidad de una mayor inversión en el diseño de actividades de formación para trabajar online.
Según las especialidades y cuerpos, algunos docentes manifiestan los problemas que surgen con las materias puramente prácticas, cuya adaptación una enseñanza online resulta prácticamente imposible.
En una gran mayoría de respuestas se observa un alto nivel de estrés, ocasionado por factores diversos, como el de compaginar el teletrabajo con la atención a bebés o niñ@s pequeños, sin ningún apoyo o la frustración que sienten por no poder transmitir el ánimo y apoyo necesario al alumnado. Todo ello marcado por la falta de horarios y jornadas laborales extenuantes.
Existe bastante coincidencia en la preocupación e incertidumbre por la falta de instrucciones claras para poder desarrollar sus tareas, así como la falta de coordinación existente en algunos casos.
Finalmente, las dificultades tecnológicas entre el profesorado y el alumnado son también un factor dominante en la mayoría de las respuestas.
CONCLUSIONES
Después de analizar los datos obtenidos en la encuesta, podemos concluir que son muchas las necesidades de nuestro sistema educativo, al que esta crisis también ha dejado al descubierto.
· Es necesaria la digitalización de nuestra comunidad autónoma si queremos que todo el alumnado tenga derecho a la misma educación.
· Debemos realizar un plan de formación inicial y permanente para el profesorado, que debido a la situación actual, refuerce el conocimiento y uso de las herramientas TIC, además de nuevas metodologías online.
· Se hace necesaria la dotación de medios para la enseñanza online tanto en los centros de trabajo como para el profesorado y el alumnado.
· Necesidad de dimensionar las plataformas digitales, para que den cobertura a todo el proceso enseñanza-aprendizaje online
· Ofrecer oportunidades de aprendizaje para el alumnado, que minimicen o eliminen la brecha digital.
· Es necesario el reconocimiento de los aprendizajes fundamentales y competencias básicas
· Las ratios alumno/profesor no son adecuadas para una enseñanza online en la mayoría de casos. Sería necesario rediseñar el marco de trabajo para garantizar una enseñanza de calidad.
Una vez analizada la respuesta al sondeo, consideramos que es necesario volver a incidir en el enorme trabajo del profesorado y agradecer que, con su esfuerzo, ha contribuido en que una enseñanza diferente sea viable, en una situación extraordinaria y con todas las limitaciones posibles.