El sindicato de Enseñanza de CCOO de León considera:
- El pasado mes de abril denunciamos la falta de controles externos.
- El Sr. Sanchez-Pascuala confirma que no hay controles externos.
- La comida viene de Valladolid una vez por semana de una empresa de Barcelona.
- Antes de servir la comida, se “regenera en un horno”.
- Queda constatado que ha bajado la calidad y ha subido el precio mientras, a la vez, se reducen las becas de comedor.
- Preocupante lo que no pueden comer nuestros escolares.
- No se cesa a nadie y nadie dimite.
Ante las declaración en el Diario de León del D. Fernando Sánchez-Pascuala, queremos recordarle que el pasado mes de abril en rueda de prensa denunciamos la falta de controles externos, la bajada de calidad y el precio de los menús escolares. Posteriormente en una reunión que mantuvimos a finales del pasado curso con la Directora Provincial de Educación de León le exigimos que se contrataran a laboratorios externos para realizar este control, y que podría ser una opción los laboratorios de la Universidad de León. La Directora Provincial de León nos informó que se iba a contratar a principios de septiembre de este año con el laboratorio que tienen la Universidad de León.
Finalmente la ausencia de controles externos, que reconoce el Sr. Sanchez-Pascuala y posiblemente internos ha hecho que la comida suministrada en los colegios citados no reuniera las mínimas condiciones que determina la Junta de Castilla y León, ni las mínimas condiciones que exigiría una buena madre y un buen padre de familia. Ahora que ha ocurrido como dice el Sr. Sanchez-Pascuala: “es un tema desagradable...”. La comida de los comedores escolares no es un tema desagradable, es una cuestión de salud pública, de organización y previsión. Es fácil privatizar y recortar servicios en Educación, y esperar a ver donde falla el sistema y luego decir como dice el Sr. Sanchez-Pascuala “... no debería haberse producido, pero ahora hay que buscar solución”. Pero como siempre nadie dimite ni a nadie se cesa por su comportamiento irresponsable, por la falta de previsión y sobre todo por no escuchar lo que denunciamos en el mes de abril.
La Junta de Castilla y León potencia intensamente el sector agroalimentario de Castilla y León apoyando a las empresas de León, pero la comida de los comedores escolares viene de Valladolid, de una empresa de Barcelona, un vez por semana y pasa por un “horno regenerador” antes de ser servida. Nos surge la duda de donde se “fabrica esta comida y donde se fabricará en el futuro”, si tenemos en cuenta que el Sr. Sanchez-Pascuala defiende la cadena del frío, pues la podemos alargar hasta países como China y como luego se regenera y es mas barata, pues para nuestros niños y niñas.
La privatización no es sinónimo de mejor gestión económica y, en los comedores escolares, más bien es todo lo contrario", respecto a la decisión de la Consejería de Educación de privatizar los comedores escolares en el curso 2008-2009.
El sindicato ha constatado que ha bajado la calidad y ha subido el precio mientras, a la vez, se reducen las becas de comedor. Por ello exigimos a la Administración que, a las puertas de nuevas adjudicaciones, recupere este servicio para destinar el ahorro a mejorar la calidad los menús y a garantizar, mediante becas, al menos una comida caliente al día a nuestros escolares. En este momento de crisis el beneficio empresarial que buscan, legítimamente, las empresas juega en contra de los intereses de la comunidad escolar, pero preferimos que ese beneficio se transforme en mejora de la calidad y por ello el sistema ha de volver a ser público. Para el Sindicato de Enseñanza de CCOO de León este es el momento de revertir esta privatización en vez de abrirse de nuevo los concursos de adjudicación.
Para CCOO hay que tener en cuenta que los comedores escolares son algo más que lugares en los que alimentarse ya que tienen como misión educar en los gustos alimenticios de nuestros niños y jóvenes y enseñarles valores de convivencia en un entorno externo a la clase. Además bastantes estímulos reciben nuestros chicos y chicas favorables a la comida basura para que encima, en su centro escolar, no se suministre una comida con una calidad adecuada y necesaria para su desarrollo.
Además de preocuparse por lo que comen los chicos y chicas, el Sindicato de Enseñanza de CCOO también está preocupado por lo que no pueden comer nuestros escolares. A falta de becas de comedor para todos, con reducciones en estos años de crisis, los precios del comedor son prohibitivos para muchas familias. Por este motivo la ecuación es muy precisa: el beneficio económico que perciben las empresas debe destinarse a garantizar, al menos, una comida caliente al día a los chicos y chicas y a que esta comida sea lo más sana y natural posible.
La recuperación de los comedores escolares es posible porque hay todavía un buen número de profesionales que trabajan en los comedores y que pertenecen a la plantilla de la Administración Regional que han constatado dificultades en los suministros ya que las compras de material las gestionan empresas privadas, algo que el sindicato también rechaza.
Para CCOO este el momento de que la Junta de Castilla y León anteponga la correcta alimentación de nuestros niños y niñas y el carácter educativo y social de los comedores escolares de nuestra región.
Finalmente la ausencia de controles externos, que reconoce el Sr. Sanchez-Pascuala y posiblemente internos ha hecho que la comida suministrada en los colegios citados no reuniera las mínimas condiciones que determina la Junta de Castilla y León, ni las mínimas condiciones que exigiría una buena madre y un buen padre de familia. Ahora que ha ocurrido como dice el Sr. Sanchez-Pascuala: “es un tema desagradable...”. La comida de los comedores escolares no es un tema desagradable, es una cuestión de salud pública, de organización y previsión. Es fácil privatizar y recortar servicios en Educación, y esperar a ver donde falla el sistema y luego decir como dice el Sr. Sanchez-Pascuala “... no debería haberse producido, pero ahora hay que buscar solución”. Pero como siempre nadie dimite ni a nadie se cesa por su comportamiento irresponsable, por la falta de previsión y sobre todo por no escuchar lo que denunciamos en el mes de abril.
La Junta de Castilla y León potencia intensamente el sector agroalimentario de Castilla y León apoyando a las empresas de León, pero la comida de los comedores escolares viene de Valladolid, de una empresa de Barcelona, un vez por semana y pasa por un “horno regenerador” antes de ser servida. Nos surge la duda de donde se “fabrica esta comida y donde se fabricará en el futuro”, si tenemos en cuenta que el Sr. Sanchez-Pascuala defiende la cadena del frío, pues la podemos alargar hasta países como China y como luego se regenera y es mas barata, pues para nuestros niños y niñas.
La privatización no es sinónimo de mejor gestión económica y, en los comedores escolares, más bien es todo lo contrario", respecto a la decisión de la Consejería de Educación de privatizar los comedores escolares en el curso 2008-2009.
El sindicato ha constatado que ha bajado la calidad y ha subido el precio mientras, a la vez, se reducen las becas de comedor. Por ello exigimos a la Administración que, a las puertas de nuevas adjudicaciones, recupere este servicio para destinar el ahorro a mejorar la calidad los menús y a garantizar, mediante becas, al menos una comida caliente al día a nuestros escolares. En este momento de crisis el beneficio empresarial que buscan, legítimamente, las empresas juega en contra de los intereses de la comunidad escolar, pero preferimos que ese beneficio se transforme en mejora de la calidad y por ello el sistema ha de volver a ser público. Para el Sindicato de Enseñanza de CCOO de León este es el momento de revertir esta privatización en vez de abrirse de nuevo los concursos de adjudicación.
Para CCOO hay que tener en cuenta que los comedores escolares son algo más que lugares en los que alimentarse ya que tienen como misión educar en los gustos alimenticios de nuestros niños y jóvenes y enseñarles valores de convivencia en un entorno externo a la clase. Además bastantes estímulos reciben nuestros chicos y chicas favorables a la comida basura para que encima, en su centro escolar, no se suministre una comida con una calidad adecuada y necesaria para su desarrollo.
Además de preocuparse por lo que comen los chicos y chicas, el Sindicato de Enseñanza de CCOO también está preocupado por lo que no pueden comer nuestros escolares. A falta de becas de comedor para todos, con reducciones en estos años de crisis, los precios del comedor son prohibitivos para muchas familias. Por este motivo la ecuación es muy precisa: el beneficio económico que perciben las empresas debe destinarse a garantizar, al menos, una comida caliente al día a los chicos y chicas y a que esta comida sea lo más sana y natural posible.
La recuperación de los comedores escolares es posible porque hay todavía un buen número de profesionales que trabajan en los comedores y que pertenecen a la plantilla de la Administración Regional que han constatado dificultades en los suministros ya que las compras de material las gestionan empresas privadas, algo que el sindicato también rechaza.
Para CCOO este el momento de que la Junta de Castilla y León anteponga la correcta alimentación de nuestros niños y niñas y el carácter educativo y social de los comedores escolares de nuestra región.
15.10.2014
