Si ya durante el presente curso académico un gran número de profesores y profesoras, maestros y maestras interinos han perdido su trabajo, las previsiones son que para el curso próximo muchos, muchísimos, más lo perderán.
Al reducirse brutalmente el número de vacantes y sustituciones no volverán a ser llamados para ocupar un puesto de trabajo.
Los brutales recortes que las Comunidades Autónomas están imponiendo en el sector educativo (y también en el sanitario), como consecuencia de la política del Gobierno
central y que suponen el aumento del número de alumnos por clase (hasta un 20%), el incremento de la jornada lectiva del profesorado (en algunos casos más del 16%), la desaparición de numeroso programas y servicios, la no cobertura de las bajas durante, al menos, los primeros quince días de las mismas, la desaparición de las reducciones
de jornada lectiva para el profesorado mayor de 55 años, la desaparición de las licencias por estudios, la supresión de otros puestos ocupados por docentes y otros recortes van a traer como consecuencia que un gran número de profesores y maestros interinos no volverán a trabajar en los próximos años.
Además la desaparición de las ofertas públicas de empleo impedirá que puedan acceder a ningún otro puesto de trabajo o consolidar el que hayan tenido estos últimos años.
El colectivo de interinos ha sido muchas veces denostado injustamente. La gran mayoría de los actuales integrantes de las bolsas de interinos han sido seleccionados en función de las notas que obtuvieron en las oposiciones o por baremos en los que la parte más importante de la puntuación se obtenía por haber superado una o varias pruebas de las oposiciones. En un buen número de casos se trata de aspirantes que superaron las notas mínimas de las oposiciones en los años anteriores pero que no alcanzaron plaza por su escaso número.
También han ocupado en muchos casos los puestos de trabajo más complejos y difíciles y los más alejados de las ciudades, con importantes costes personales y graves cargas familiares.
Su no contratación supone tirar por la borda una gran riqueza de nuestro país. Dejaremos sin trabajo a un personal formado y con experiencia, al tiempo que daremos un golpe muy fuerte a la calidad del sistema educativo público. Un despilfarro que no puede permitirse el sistema educativo público ni el país en su conjunto.
Por ello, la Federación de Enseñanza de CCOO hoy, 26 de junio de 2012, quiere instaurar este día como el día del Profesor Interino en reconocimiento a la labor que han desarrollado y hace un llamamiento a seguir luchando contra la reducción de personal docente en los centros educativos públicos para conseguir la ampliación de las plantillas de los centros y la vuelta de los compañeros y compañeras a los que tan injustamente se expulsa del sistema educativo.

