El 27 de Abril se ha publicado el Decreto 29/2015 por el que se fijan los precios públicos por servicios académicos en estudios universitarios en Castilla y León para el curso 2015-16, en el que se ha optado por mantener los mismos precios que el curso pasado en un contexto de deflación ligeramente superior al 1%.
Para la Federación de Enseñanza de CCOO de Castilla y León, la política es claramente continuista y con el brusco giro de subida de tasas producido en el año 2012 ha supuesto y sigue suponiendo que estudiar en las Universidades Públicas de Castilla y León sea hacerlo en unas de las más caras del Estado. Esta política de precios elevados y abusivos ha ocasionado una pérdida de alumnado, dificultando el acceso a los estudiantes con menos recursos y disminuyendo la movilidad estudiantil, números que contrastan con el claro aumento de alumnos en el siempre favorecido sector privado, en el mismo período.
Medidas como éstas y, en general, la política de financiación de las Universidades Públicas que está llevando a cabo la Junta de Castilla y León, conducen a un cambio del modelo de servicio público universitario por un modelo de empresa pública, encargada de autofinanciarse y en la que las normas que van a regir son única y exclusivamente las de la competitividad y el mercado.
Desde CCOO denunciamos que esta situación está provocando, además de una merma del propio sistema público universitario, una disminución de la calidad, favoreciendo la precarización del empleo y expulsando el talento joven de la Universidad. Todo ello unido a la pérdida de especialización del profesorado por falta de renovación de las plantillas y con una abuso, por parte de las Universidades, de la contratación de figuras docentes eventuales, provocando la consiguiente inestabilidad en el sistema.
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Para la Federación de Enseñanza de CCOO de Castilla y León, la política es claramente continuista y con el brusco giro de subida de tasas producido en el año 2012 ha supuesto y sigue suponiendo que estudiar en las Universidades Públicas de Castilla y León sea hacerlo en unas de las más caras del Estado. Esta política de precios elevados y abusivos ha ocasionado una pérdida de alumnado, dificultando el acceso a los estudiantes con menos recursos y disminuyendo la movilidad estudiantil, números que contrastan con el claro aumento de alumnos en el siempre favorecido sector privado, en el mismo período.
Medidas como éstas y, en general, la política de financiación de las Universidades Públicas que está llevando a cabo la Junta de Castilla y León, conducen a un cambio del modelo de servicio público universitario por un modelo de empresa pública, encargada de autofinanciarse y en la que las normas que van a regir son única y exclusivamente las de la competitividad y el mercado.
Desde CCOO denunciamos que esta situación está provocando, además de una merma del propio sistema público universitario, una disminución de la calidad, favoreciendo la precarización del empleo y expulsando el talento joven de la Universidad. Todo ello unido a la pérdida de especialización del profesorado por falta de renovación de las plantillas y con una abuso, por parte de las Universidades, de la contratación de figuras docentes eventuales, provocando la consiguiente inestabilidad en el sistema.
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