Es común que las personas LGTBI+ enfrenten situaciones de discriminación en el trabajo a causa de su orientación sexual, identidad sexual y expresión de género, pudiendo llegar incluso a sufrir situaciones de acoso y/o maltrato físico, que pueden provocar daños importantes a la salud.
En CCOO estamos convencidas y convencidos de que la lucha por la igualdad efectiva de derechos de las personas LGTBI+ y por la diversidad familiar es asunto de todas las personas que forman parte del sindicato, independientemente de su orientación sexual, identidad sexual y/o expresión de género y características sexuales. Esta es una lucha que se inscribe en el corazón mismo de los valores de la organización: solidaridad, justicia social, igualdad de derechos, además de salud y seguridad en el trabajo.
Pero muchos miles de personas en todo el mundo sufren persecución y todo tipo de calamidades por afirmar su orientación sexual. Los avances legislativos, la mayor comprensión y aceptación social de las personas LGTBI+ no hacen olvidar que aún queda mucho por hacer y que la sociedad nunca está a salvo de la regresión social. El informe de la Agencia Europea de Derechos Fundamentales, “Un largo camino por recorrer para la igualdad LGBTI”, a través de una encuesta dirigida únicamente a personas LGTBI, arroja datos muy claros: Una de cada cuatro (26%) personas encuestadas ocultan ser LGBTI en el trabajo. Dos de cada diez (21 %) se sintieron discriminadas en el trabajo durante el año anterior a la encuesta. Una de cada diez (10 %) se sintió discriminada al buscar trabajo durante el año anterior a la encuesta. Y sólo el 11 % de los casos más recientes de discriminación se denunciaron al organismo de igualdad del país o a alguna otra organización.
¿Y en España? En nuestro país, la igualdad efectiva de derechos de las personas LGTBI+ no se ha logrado. Sigue existiendo discriminación y, violencia verbal y física. Y cuando estas acciones se producen en los centros de trabajo es preciso hacerles frente desde la prevención y la salud laboral. Esta tarea constituye, para CCOO, un reto de gran importancia. Y esa es la finalidad del documento “LA LGTBIFOBIA DESDE LA PREVENCIÓN DE RIESGOS LABORALES” que se ha presentado "para ser una herramienta de nuestras personas delegadas en su tarea a favor de lograr espacios seguros y saludables para todas las personas trabajadoras, de forma que así el cumplimiento del derecho a la igualdad de trato y no discriminación en la empresa sea una realidad", tal y como aseguro Carolina Vidal, secretaria confederal de Mujeres, Igualdad y Condiciones de Trabajo.
Y es que "el rumor insidioso, el insulto abierto o la burla dudosa, ocasional o repetitiva, proveniente de la dirección, clientes, personas usuarias y/o compañeras de trabajo, atentan contra la dignidad de las víctimas", remató Vidal.
"Son las condiciones de la organización de trabajo las que permiten comportamientos LGTBIfóbicos de discriminación y acoso por razón de orientación sexual, identidad y/o expresión de género y generan un riesgo para la salud de las personas LGTBI+", aseguró Mariano Sanz, secretario de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental.
En el documento para nuestro activo sindical, se caracteriza una amplia gama de manifestaciones LGTBIfóbicas y diferentes grados, que pueden ser tanto internas como externas. Así, chistes, risas, burlas, agresiones, sentimientos de animadversión son conductas. De igual forma, existen diferentes grados de LGTBIfobia. El grado mayor de estas actitudes son el hostigamiento continuado, la discriminación, los insultos verbales, los empujones y la agresión verbal o física.
De este modo, se consideran conductas intolerables todas aquellas conductas dirigidas a limitar la comunicación en el ámbito laboral, las actuaciones dirigidas a desprestigiar a una persona o comprometer su salud física o psicológica. "Estos riesgos y daños tienen una repercusión personal pero deben abordarse de las la acción colectiva en el ámbito laboral. ¿Cómo? Activando las relaciones laborales, la responsabilidad social desde las perspectiva de los riesgos laborales, exigió Sanz.
En este trabajo conjunto recoge y detalla, así mismo, todas las normas y sentencias de los órganos jurisdiccionales que velan por la salud, seguridad y garantías de las personas trabajadoras en el desempeño de sus funciones, desde la propia Constitución Española a las sentencias del Tribunal Constitucional.
CCOO proponemos definir dos espacios de trabajo, por un lado actuaciones para prevenir, identificar y actuar ante situaciones de discriminación y acoso derivadas de la orientación sexual, la identidad sexual, la expresión de género, las características sexuales y la diversidad familiar. Y por otro, impulsar las evaluaciones de riesgos psicosociales y la prevención de los mismos, cambiando las deficiencias en la organización del trabajo (arbitrariedad en la asignación de puestos y cargas de trabajo, tareas, horarios, etc.) que puedan ser usadas para discriminar y acosar o que pueden favorecer la aparición de conductas violentas o de acoso por una deficiente organización del trabajo.
Para nosotros y nosotras hay algunos aspectos importantes que tratar respecto a la seguridad y o la salud en el trabajo: sensibilización, información y formación para el colectivo de personas trabajadoras en general; identificación y evaluación de las condiciones de trabajo; y protección de las personas LGTBI+. "El objetivo es que surja un plan, una estrategia y un compromiso en forma de protocolo de actuación en la empresas para la prevención y la posibilidad de afrontar situaciones de discriminación. hay que atender a las personas mediante la existencia de cadenas de denuncia", explicó el responsable sindical.
En último término, y quizá la parte de más práctica de este trabajo, se incluyen algunos ejemplos para la negociación colectiva, que supone un espacio esencial para la plasmación, fijación y reivindicación de derechos laborales.
