La intranquilidad de las y los mutualistas de Muface llega a su fin. Asisa y Adeslas han sido las dos únicas compañías que han presentado sus ofertas, y, por tanto, Muface formalizará solo con estas dos aseguradoras, tras la salida de DKV, el nuevo Concierto de Prestación de Asistencia Sanitaria en territorio nacional durante los años 2025, 2026 y 2027. Para el exterior, el Concierto para la Asistencia Sanitaria se formalizará con Nueva Mutua Sanitaria.
Se abre ahora un proceso que puede prolongarse todo el mes de marzo, y parte del mes de abril: apertura de las ofertas para Muface, evaluación técnica y económica, propuesta de adjudicación y, finalmente, formalización del contrato. Ahora bien, el proceso puede, incluso, alargarse más si hay recursos e impugnaciones.
Terminado todo este proceso, posiblemente a principios de mayo (en su momento informaremos de la fecha exacta), se abrirá un plazo extraordinario para cambio de entidad, obligatorio, obviamente, para los mutualistas de DKV, plazo que, es posible, empalme con el plazo ordinario de junio, y del que informaremos de manera puntual y detallada cuando se determine.
REITERAMOS: con independencia de todo este proceso, todas las personas mutualistas de MUFACE, tanto titulares como beneficiarias, van a continuar recibiendo la misma asistencia sanitaria que disfrutan con las condiciones actuales, en virtud de las órdenes de continuidad del servicio dictadas por la Mutualidad de acuerdo con el artículo 288 de la Ley de Contratos del Sector Público.
¿Cuál ha sido la actuación de CCOO en esta crisis de MUFACE?
Desde el minuto cero, CCOO ha reivindicado una solución inmediata que garantizara una asistencia sanitaria de calidad para 1.500.000 de empleados públicos. Con los lemas, Muface solución ya, ¡Nuestra salud no es una mercancía!, ¡No somos rehenes!, ¡Unidos por tu bienestar, comprometidos con la salud!, hemos exigido celeridad al Gobierno para cerrar un nuevo convenio y poner sobre la mesa un plan de viabilidad para la asistencia sanitaria del funcionariado público. E, igualmente, hemos reclamado con contundencia a las aseguradoras que priorizaran la salud de las personas mutualistas por encima de sus réditos económicos y que dejaran de utilizarlas como rehenes.
Con este posicionamiento nos hemos movilizado en varias ocasiones en unidad sindical con todas las organizaciones sindicales (excepto CSIF, convertida en portavoz de los intereses de las aseguradoras), reivindicando que se debía concretar urgentemente un acuerdo razonable que garantizara la asistencia y calidad sanitaria de las empleadas y empleados públicos. Ahora, después de haber solucionado la crisis actual, será el momento de trabajar en un plan de viabilidad a largo plazo para no volver a sufrir esta situación de incertidumbre y este chantaje cada pocos años.
