CCOO convoca protestas en todo el Estado entre el 22 y el 26 de febrero.
La Federación de Enseñanza tacha de indignante la pretensión patronal de fijar la retribución de las/os educadores infantiles en torno a los 900 euros mensuales, o de que las/os maestras/os aumenten su jornada laboral, y exige unas condiciones de trabajo dignas.
La dignificación del trabajo de este colectivo se ha convertido en una prioridad para CCOO. El sector, muy feminizado (más de un 90% son mujeres), precarizado y poco valorado socialmente, se caracteriza por unos salarios muchos más bajos que los que perciben otros profesionales del ámbito educativo que desarrollan tareas análogas, así como por toda una serie de prácticas irregulares que repercuten de manera directa sobre sus condiciones laborales: profesionales que ocupan puestos de categorías inferiores a la cualificación que poseen; número de estudiantes por aula superior a lo permitido por ley; falta de recursos materiales que acaban incidiendo sobre la salud de trabajadoras y trabajadores; ritmo elevado de trabajo en espacios insuficientes para el número de niños y niñas al que se debe de atender, etc.
La radiografía sería la de un sector en el que los puestos de trabajo están ocupados de forma mayoritaria por mujeres, con una edad media que oscila entre los 31 y 45 años, trabajan en los puestos de educadora infantil (70%) y maestra (20%), con una antigüedad en la empresa de entre 5 y más de 10 años, contrato fijo, a tiempo completo y sin posibilidades de promoción. Además, desarrollan sus tareas mayoritariamente en jornada partida. El resto de las categorías profesionales del sector (10%) suele emplear a personas con un nivel de estudios básicos que realizan tareas poco cualificadas y en jornadas parciales.
Tras casi dos años de negociaciones, en los que las patronales han mostrado una actitud inmovilista y victimista, sin querer abordar de manera efectiva la problemática laboral de más de 50.000 personas y sin moverse de sus planteamientos iniciales, CCOO hace un llamamiento a las trabajadoras y trabajadores del sector para que se concentren en los próximos días en defensa de unas retribuciones y unas condiciones de trabajo dignas del siglo XXI. La pretensión patronal de fijar la retribución de las/os educadoras/es infantiles en torno a los 900 euros mensuales, o de que las/os maestras/os aumenten su jornada laboral, es indignante, vergonzosa y muestra su más absoluta falta de respeto a la encomiable labor de estos colectivos. La educación en la etapa más temprana deja de ser una prioridad para convertirse en un negocio cuya principal preocupación es la búsqueda de rentabilidad económica.
Ante la pretensión patronal de perpetuar esta situación, sin valorar el esfuerzo realizado por las trabajadoras y los trabajadores del sector durante los años de una crisis que no generaron, CCOO convoca concentraciones en todo el Estado entre el 22 y el 26 de febrero, y hace un llamamiento para que las familias se sumen de manera activa en la dignificación de un primer ciclo educativo de calidad que constituye la base inicial del aprendizaje de los niños y las niñas.