Educación soluciona así el limbo en el que habían quedado los estudiantes mientras se implanta la reválida de secundaria.
España debate si los alumnos deben seguir en las aulas hasta los 18 años.
El Ministerio de Educación ha aprobado ya la solución transitoria para que los alumnos de Formación Profesional básica no se queden en el limbo y sin título este año y el que viene. Estos 68.000 estudiantes podrán obtener el título de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) sin pasar, de momento (en principio durante los próximos dos cursos), la reválida que contempla la última ley educativa.
Este ciclo, incluido en la reforma educativa (Lomce), sustituye a los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI), destinados a alumnos con dificultades para completar la secundaria. A partir de los 15 años (o excepcionalmente a los 14), los estudiantes que hayan repetido o vayan a repetir pueden acceder a la FP básica si lo recomiendan sus profesores y lo aprueban sus padres.
Los PCPI incluían un primer curso obligatorio y un segundo voluntario para los que quisieran sacarse el título de ESO. Con la FP básica, los dos cursos son obligatorios. La normativa contemplaba, además, que tenían que aprobar la reválida prevista por la Lomce (exámenes externos obligatorios al final de secundaria y bachillerato) para poder obtener ese título.
Pero el calendario de aplicación de la reforma no incluye esas reválidas nacionales hasta dentro de dos cursos y los primeros alumnos de FP básica acabarán el próximo junio. El anterior ministro de Educación, José Ignacio Wert, anunció en marzo de 2014 en el Congreso de los Diputados que aprobaría una disposición para que estos alumnos se graduaran con un "examen especial", según señalaron entonces fuentes de su departamento.
La solución que finalmente ha adoptado el ministerio, ahora con Íñigo Méndez de Vigo a la cabeza, es que mientras no se ponga en marcha la reválida, conseguirán el título de la ESO cuando sus profesores valoren "que han alcanzado los objetivos de la Educación Secundaria Obligatoria", es decir, sin ningún tipo de examen adicional.
Esta medida está incluida en el decreto que regula las características de la prueba final de 6º de Primaria, que ha sido aprobada este viernes por el Consejo de Ministros. La intención del Ejecutivo era aprobar conjuntamente un decreto con las tres pruebas externas. El pasado agosto, el ministerio dejó en suspenso el decreto para los exámenes finales de secundaria y bachillerato ante la presión de las comunidades autónomas gobernadas por partidos de la oposición.
¿Habrá 'rankings' de los colegios?
El departamento de Wert propuso en 2012 a las comunidades crear una plataforma en Internet con información sobre los colegios e institutos que se sostienen con fondos públicos. Serviría “para la rendición de cuentas” de los colegios donde se ofrecerían datos de pruebas externas detallados por centro, los polémicos rankings. El decreto que regula las características de las pruebas de 6º de primaria, aprobado ayer por Consejo de Ministros, solo señala que los resultados de estas evaluaciones “serán puestos en conocimiento de la comunidad educativa”. Un portavoz del ministerio señaló ayer que la publicidad de esos resultados “no está definida todavía” y no aclaró si la web que anunció el anterior ministro sigue en marcha.