El educativo, junto con el comercio, son los sectores que más empleo pierden según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. En número de afiliados medios a la Seguridad Social, las comunidades de Madrid, Andalucía, Cataluña y País Valencià son las más afectadas.
Los datos de empleo ofrecidos por el Gobierno a lo largo de la mañana de hoy confirman la pérdida de empleo en el sector educativo, con especial incidencia en la educación infantil y los sectores socioeducativos.
Si atendemos a los datos de afiliación media, que reflejan el promedio de las personas que están en situación de alta, comprobamos que el descenso es de un 3,89%, es decir, 38.340 personas en relación al mes de marzo. A la pérdida de puestos de trabajo de abril hay que sumar 15.255 más correspondientes a las cifras de marzo respecto a febrero, lo que suponía un 1,52% menos.
El total de la afiliación media a la Seguridad Social durante la crisis sanitaria del COVID-19 ha disminuido en 53.595 personas en el sector educativo, un 5,35% menos que en febrero.
Comparando los últimos diez años, durante toda la crisis económica y la progresiva recuperación de empleo en el sector en las mismas fechas vemos como, salvo en el año 2012 en el que se redujo en un 0,12% la afiliación media a la Seguridad Social, el empleo nunca ha disminuido de marzo a abril, lo que sin duda es una muestra evidente de los efectos que la crisis del COVID-19 está teniendo en el sector.
Este dato aparece desagregado por sectores y comunidades autónomas y marca una tendencia clara de destrucción de empleo durante la crisis sanitaria del COVID-19.
Además, hay que destacar que es un sector altamente feminizado. Según los datos del SEPE, desde septiembre hasta marzo se habían realizado un total de 459.456 contratos en el sector educativo, de los que el 66%, 304.045, correspondían a mujeres y el 34%, 155.411, a hombres.
En cuanto a la tipología, a excepción del periodo el inicio de curso, el porcentaje de contratos temporales que se realizan está cercano al 90% la mayoría de los meses.
Sin duda esta destrucción de empleo está íntimamente ligada a la temporalidad en el sector educativo en su conjunto, donde la duración media de los contratos celebrados desde septiembre de 2019 hasta marzo de 2020 es de 137 días, siendo mayor en septiembre y octubre que en el resto de meses.
La Federación de Enseñanza de CCOO se dirigió a la ministra de Educación y Formación Profesional el pasado día 12 de marzo para advertir que, tras el cierre de centros educativos en varias comunidades autónomas, muchas empresas prestatarias de servicios estaban rescindiendo contratos.
En las actividades en las que se está destruyendo empleo, es en el sector educativo donde mayor feminización y precariedad existe. La Federación de Enseñanza de CCOO denuncia que la crisis del Coronavirus-COVID19 está siendo la excusa para cebarse con los sectores educativos con el personal más desprotegido, por lo que pide a la Administración que vele por la correcta aplicación de las medidas aprobadas por el Gobierno para evitar despidos, así como por que las administraciones públicas respeten los contratos establecidos con las entidades prestatarias de servicios.
Asimismo, CCOO pide que se aborde de manera inmediata el problema de la temporalidad en el sector educativo y que se palíe la estacionalidad del trabajo, vinculada a la duración del curso académico. Esto supone una enorme inestabilidad en las platillas docentes (mensualmente se realizan decenas de miles de contratos en el sector educativo y prácticamente el 90% son temporales en sus distintas modalidades), con el consiguiente perjuicio educativo para el alumnado.
Es urgente una apuesta clara por el empleo estable en todo el sector educativo, y eso pasa por la interlocución con el Ministerio de Educación, las administraciones educativas, las patronales y por un gran pacto por el empleo en el sector educativo.