La Federación de Enseñanza pide poner fin a la lesbofobia en el ámbito educativo
Difunde un manifiesto en el insta a las administraciones educativas a poner en marcha protocolos de actuación a favor de las diversidades en las escuelas.
Somos mujeres y lesbianas. Ser visibles es una acción fundamental para reapropiarnos del espacio que nos pertenece. Si es complicado ser mujeres en un sistema androcéntrico y patriarcal, ser mujeres y lesbianas en el sistema heteropatrial lo es mucho más.
A día de hoy, en pleno siglo XXI, aún se presupone la heterosexualidad de todas las mujeres, sin tener en cuenta la diversidad de afectos y la libertad individual de elección. Por eso es tan importante ser visibles, porque supone poner de manifiesto las distintas realidades existentes.
Cuantas más seamos, más fácil será continuar con nuestras reivindicaciones y llevar una vida plena, con los mismos derechos, como la reproducción asistida, tantas veces negada a mujeres lesbianas. Disponer de referentes públicos facilita la vivencia de nuestras jóvenes.
Desde la Federación de Enseñanza de CCOO recordamos la necesidad de generar espacios proclives a la vivencia en igualdad de condiciones de nuestras alumnas lesbianas y conseguir protocolos específicos que pongan fin a la lesbofobia en contextos educativos.
Muchas de nuestras profesoras lesbianas ya han dado el paso de ser referentes visibles que ponen de manifiesto una vivencia en positivo, que transmiten a las alumnas que ser mujeres lesbianas es un orgullo, una realidad silenciada que necesita expandirse para hacer de la educación un proceso de aprendizaje a favor de la diversidad, la educación en igualdad y la eliminación de las actitudes sexistas y LGTBIQ+fóbicas.
Pero aún somos pocas, necesitamos ser más. Reivindicamos espacios laborales seguros que nos permitan erradicar la lesbofobia, la discriminación, las actitudes sexistas y la exclusión por motivos de orientación sexual, expresión e identidad de género.
Instamos a las administraciones educativas a poner en marcha de forma inmediata protocolos de actuación a favor de las diversidades en las escuelas, implementar las leyes aprobadas para erradicar la LGTBIQ+fobia y garantizar la visibilidad de las mujeres lesbianas en contextos educativos, así como incorporar nombres de mujeres lesbianas visibles entre las lecturas para el profesorado en la formación inicial, de manera que se favorezca una educación en igualdad y una educación proclive a las diversidades. Es prioritario disponer de un proceso formativo para el profesorado en materia LGTBIQ+, desarrollar propuestas curriculares que impacten en una educación en la igualdad, que mitiguen el sexismo y el machismo, que pongan como prioridad la coeducación.
Ni una niña, ni una joven deben sentirse excluidas, invisibilizadas, acosadas o violentadas por motivo de orientación sexual, expresión e identidad de género. Ser lesbiana y poder vivirlo en los centros educativos no es una cuestión menor, entra dentro de la necesidad de avanzar en los derechos humanos, situar la educación en el centro de la transformación social y la igualdad efectiva legal y social.
No podemos olvidarnos de las mayores dificultades que sufren nuestras compañeras y hermanas lesbianas –trans, afrodescendientes, con diversidad funcional, de procedencias múltiples–, que no cumplen con las expectativas sociales y cuyas intersecciones dificultan una propuesta de vida emancipada, libre, visible, y tienen mayores dificultades en el acceso al ámbito laboral.
Por este motivo, la Federación de Enseñanza celebra cada año el día 26 de abril y anima a los centros educativos a realizar actividades con el alumnado que promuevan una vivencia plena.