El secretario general de la FECCOO, José Campos, comenzó su intervención afirmando que sobran razones para convocar movilizaciones contra la política educativa del Gobierno. "Esperamos que el Ministerio de Educación escuche el clamor de la calle y de la comunidad educativa y que la futura ley educativa sea de todos y no de unos cuantos; Además pide al Ministerio que no imite el modelo educativo alemán, que fomenta la segregación del alumnado, ni el británico, que promueve la privatización. afirmó Campos;
CCOO también le pide al ministro que no vuelva a satanizar a la Formación Profesional como en los años setenta y en un país con más del 55% de jóvenes en paro. El sindicato aboga por una FP que sea realmente una alternativa "y no un cajón de sastre ni la hermana pobre del sistema educativo".
Campos denunció también el centralismo del borrador de la LOMCE, del que comentó que no servía para avanzar, mientras que con la descentralización educativa el sistema ha demostrado funcionar correctamente.
Las protestas del día 13 serán también contra una educación elitista. "No queremos que la enseñanza sea un ranking ni un desfile de modelos", apostilló Campos. En este sentido exigió la supresión de la selección temprana del alumnado.
El responsable de la FECCOO expresó su rechazo a que la enseñanza se convierta en un mercado, como pretende el Ministerio con la LOMCE. "Por el contrario -añadió Campos- la educación debe seguir siendo un servicio público y un instrumento de transformación social".
Por otro lado, desde CCOO denunciamos el ataque injustificado y tendencioso tanto a las lenguas cooficiales, como a la materia de "Educación por la Ciudadanía", apostando nuevamente por la asignatura de la Religión y su alternativa obligatoria, lo que demuestra su clara orientación ideológica.
Además, cualquier reforma del sistema educativo exige una memoria económica que acompañe al cambio legislativo. En el caso de esta reforma no se trata, como argumenta el Ministerio, de unos meros ajustes en la LOE, sino un cambio en la estructura del sistema educativo. "Este proyecto sólo sirve de máscara para ahondar en una reforma ideológica, segregadora y elitista del sistema educativo" manifiesta el responsable sindical.
Por ello, desde CCOO se exige al Ministerio que retire el último borrador de la ley y presente uno nuevo en el que recoja las reivindicaciones de la comunidad educativa.
En definitiva, el día 13 volverá a escucharse un clamor generalizado contra la política educativa del Gobierno en el que se escuchará la voz de los recortes, de los padres y madres, del profesorado, de los trabajadores de la educación y de toda la comunidad educativa.