
Los datos facilitados por CCOO confirman que la última cifra sobre la cobertura de las personas en paro en España reflejan que 1.293.000 parados en el registro de los SPEE no tienen ninguna prestación económica.
En una nota difundida hoy, CCOO afirma que la cobertura de las personas en desempleo ha mantenido un porcentaje bastante elevado durante la crisis iniciada en 2008, pero el progresivo agotamiento de las prestaciones y su transición hacia el componente asistencial está reduciendo de forma rápida el nivel inicial. La abrupta y profunda recesión que sufre la economía española generó una importante destrucción de empleo que aumentó significativamente el número total de beneficiarios al cumplir con las condiciones de acceso establecidas (+1.663 miles entre 2007-2009). El aumento en el número de beneficiarios de las prestaciones ha cumplido con la doble función de mejorar la capacidad económica de las personas que habían perdido el empleo y colaborar en la función de estabilizar la demanda interna española en unas condiciones tan perjudiciales de la economía española.En una primera etapa de la crisis, las prestaciones contributivas, las más elevadas, fueron mayoría (60,5% del total) mientras que las asistenciales (428 euros) ocupaban una presencia inferior (40,4% del total). Se cumplía con la doble condición de elevar el porcentaje de cobertura y la cuantía dirigida a estas personas que habían perdido su fuente de ingresos. La tasa de cobertura sobre el número de parados registrados aumentó incluso desde el 63,4% al 71,4%.
Para el secretario general de CCOO, la larga duración del ciclo económico expansivo (1994-2007) hizo que a pesar de la excesiva temporalidad en el empleo, un número importante de trabajadores acumulará las condiciones para acceder a una prestación contributiva. El número de beneficiarios de la prestación con una superior cuantía que mantienen además, la aportación de cuotas al sistema de pensiones, mas que se duplicó en la etapa 2007-2009 (desde 780,2 miles a 1.624,8 miles). El paso del tiempo sin encontrar solución a la crisis y con nueva destrucción de empleo, ha hecho que cayera de forma continuada el número de beneficiarios de la prestación contributiva por agotamiento del tiempo máximo de duración (desde 1.624,8 miles a 1.327,1 miles en agosto de 2011) lo que implica un reducción del -18,3% desde 2009 (-297.100 personas) y, lo que es peor, el escenario advierte sobre la posibilidad de una reducción adicional de 400.000 personas en un periodo corto después de las elecciones de 20 de noviembre.
La normativa actual de protección a las personas en desempleo ha permitido la concesión de la prestaciones asistencial a un número importante de personas mayor al de 2007 (de 373,9 miles a 1.160 miles en agosto de 2011). Este aumento en el número de beneficiarios de este tipo de prestación es una ayuda para muchas familias españolas, pero es conveniente reseñar que la cuantía es muy modesta (428 euros en 12 mensualidades) y el número de beneficiarios también ha comenzado una tendencia de descenso desde 2010.
El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo denuncia que "la suma de los dos efectos mencionados en la prestación contributiva y asistencial, hace que la tasa de cobertura de las personas en paro en España haya disminuido varios puntos desde 2010 (hasta el 63,6% en agosto de 2011) y la última cifra refleje a 1.293.000 parados en el registro del SPEE sin ninguna prestación económica".
La situación española es muy delicada para muchas personas como demuestra el hecho que 1.367,5 miles de hogares declaren tener todos los miembros en paro o, que en el IIT de 2011 haya 2.310,1 miles de personas en paro desde hace más de 1 años, es decir, su desempleo sea considerado de larga duración.
En opinión de Toxo, la muy delicada situación de la economía española "reclama la adopción de medidas para intentar reactivar la actividad pero, además, necesita disponer de una política ambiciosa y sostenible de protección al desempleo, que permita una cobertura digna a las personas en peor situación; de otra manera se estará cargando el peso de la crisis sobre el segmento más desfavorecido de la población".