
Los sindicatos del sector ferroviario de CCOO, CGT, SCF, SEMAF, SF-Intersindical y UGT con representación en los comités generales de Adif, FEVE y Renfe Operadora han expresado su unánime y absoluto rechazo a la reforma laboral y creen que hay sobradas razones para convocar y adherirse a la huelga general el próximo 29 de marzo.
En un comunicado conjunto CCOO, CGT, SCF, SEMAF, SF-Intersindical y UGT manifiestan que:
“Como representantes de los trabajadores y trabajadoras de Adif, FEVE y Renfe Operadora no podemos aceptar esta reforma, que desequilibra inmensamente las relaciones laborales, dejando al trabajador/a más desprotegido que nunca, facilita y abarata el despido, aumenta y precariza las modalidades de contratación, crea desigualdad a la hora de optar por un puesto de trabajo, rompe el equilibrio de la negociación colectiva y abre las puertas al despido, por primera vez, en las administraciones públicas.
El objetivo de nuestro trabajo en Adif, FEVE y Renfe Operadora es prestar un servicio eficiente y de calidad a la sociedad española, garantizando la cohesión territorial del Estado y la movilidad de los ciudadanos y ciudadanas. Es por ello que nos preocupa, más si cabe, la nueva reforma laboral, ya que lamentablemente las políticas que se vienen aplicando han supuesto la degradación progresiva de los servicios públicos y también de políticas sociales que, en el marco de la crisis, está sirviendo de coartada para su escalonada privatización, aumentando las desigualdades entre la ciudadanía.
El nuevo Gobierno, lejos de corregir las fracasadas políticas anteriores, ha optado por insistir y profundizar en ellas. Hace ya dos años y medio el movimiento sindical propuso un Pacto por el Empleo, que contemplase la política fiscal, la reforma del sistema financiero, la política de rentas, el control de los precios, la política industrial, con medidas destinadas a la reactivación económica y al cambio del modelo productivo. Ni éste ni el anterior Gobierno fueron sensibles a esta propuesta.
Ahora, y por enésima vez, quieren que seamos los trabajadores y trabajadoras quienes paguemos las consecuencias de un sinfín de nefastas decisiones políticas, absolutamente inútiles e injustas.
Entendemos que esta reforma laboral, lejos de ser la solución, ya se está convirtiendo en un problema añadido que agudiza aún más la crítica situación económica, social y laboral que atraviesa nuestro país. Hay alternativas pero no quieren escucharlas. Por ello, en un ejercicio de responsabilidad con la sociedad y por el compromiso que tenemos con los trabajadores y trabajadoras de nuestras empresas, hacemos un llamamiento a los ferroviarios y ferroviarias para que secunden de forma masiva la huelga general el próximo 29 de marzo.”